La psicología deportiva es una disciplina que se ha vuelto cada vez más popular en los últimos 20 años. Se puede mencionar varias áreas en las que los psicólogos deportivos han ayudado a los deportistas, tales como maximizar el aprovechamiento de las sesiones de entrenamiento, mejorar la confianza y la concentración y lograr el mayor rendimiento del deportista.

Ideas falsas y mitos que hay sobre la psicología deportiva.

Algunas de las afirmaciones que los deportistas pueden oír acerca de esta disciplina (bueno, deportistas y no deportistas), son claramente mitos o malentendidos. Voy a comentaros los tres más frecuentes:

1. La psicología del deporte por sí sola puede hacer un superdeportista. Lo cual es mentira, ya que la buena competición está formado por cuatro áreas y muy conocidas: el físico, la parte táctica, lo técnico y lo psicológico. Así que se depende de cada una de ellas por igual.

2. Los psicólogos deportivos sólo trabajan con los deportistas en las competiciones. No es así, tiene que haber un trabajo antes de la competición, durante la competición y posterior a la competición.

3. Para que la mente esté realmente bien preparada, lo único que hay que hacer es hablar con un psicólogo. Los deportistas tienen que apreciar que las destrezas mentales son como destrezas físicas. Es decir, que hay que entrenar. Como todo en esta vida para que algo nos salga bien.

La importancia de las Metas dentro del rendimiento deportivo:

La eficacia del establecimiento de metas como estrategia de mejora del rendimiento está bien consolidad siempre que cumplan una serie de características:

– Las metas específicas son más eficaces que las metas vagas. Por ejemplo: es más efectivo para un mediofondista ponerse la meta de entrenar lo suficiente como para mejorar por veinte segundos su récord personal en la carrera de mil metros que ponerse la meta de simplemente “mejorar su velocidad”.

– Las metas tiene que identificar las circunstancias bajo las cuales ocurriría la conducta deseable: por ejemplo, la meta para una jugadora de baloncesto de practicar sus tiros en suspensión resulta algo vaga. La meta de practicar los tiros en suspensión hasta poder encestar cinco tiros seguidos desde tres metros teniendo a otra jugadora que le defienda, identifica las circunstancias de ejecución más reales a las de un partido.

– Las metas específicas, realistas y que entrañan un reto son más eficaces que las del tipo “hazlo lo mejor que puedas”.

Las emociones y el deporte, algo muy importante.

La mayoría de nosotros ha experimentado el enfado alguna vez en la vida. En enfado y las otras emociones son una parte fundamental de la experiencia humana y desempeñan un papel importante en la vida del deportista.

Dentro de las emociones, me gustaría hablaros y dar más importancia por un lado a los EFECTOS DEL NERVIOSISMO EXCESIVO EN EL RENDIMEINTO ATLÉTICO. Y POR OTRO TAMBIÉN HABLAROS DEL ENFADO Y EL RENDMIENTO EN EL DESPORTISTA.

Sobre el nerviosismo excesivo…
Muchos deportistas y entrenadores hacen referencia al nerviosismo excesivo (ansiedad o miedo) para explicar el rendimiento inferior, Frases que sirven como ejemplo son:: “El mayor problema del equipo en este momento es que están demasiado tensos”. O “Pedro tiene miedo de cometer algún error y por eso está así”,etc…

Estrategias para enfrentar el nerviosismo excesivo o el miedo:

– Minimizar las causas del nerviosismo y el miedo. (Reconocer y cambiar el pensamiento negativo. Reestructuración cognitiva). Es importante también promover los pensamientos relajantes).

– Cambiar las reacciones del cuerpo ante los eventos estresantes.

– Visualizar una escena relajante.

Esto era sobre el nerviosismo excesivo, pero Sobre el enfado y el rendimiento deportista, me gustaría comentar que las formas agresivas que varios deportistas han aprendido para mostrar su enfado no siempre son problemáticas. El tipo de agresión que se considera deseable varía de deporte en deporte, pero es cierto que Durante las últimas décadas la agresión excesiva y la violencia en el deporte, tanto dentro como fuera del terreno de juego, han llegado a ser percibidas como un problema social.

Pero existen Estrategias para frenar el enfado. Se sugiere tres pasos básicos para enseñar a los deportistas a reemplazar su conductas de enfado por una conducta alternativa aceptable:.

Paso1: Identificar las situaciones que causan enfado.

Paso2: Enseñar conductas alternativas que compitan con el enfado. . Por ejemplos autoverbalizaciones que ayudan a mantenerse controlado: “No dejaré que me afecte”; “Voy a manejar esto mejor si me mantengo relajado y en plena posesión de la situación”.”Jugaré mejor si estoy relajado y divirtiéndome”. Y también es importante el autodiscurso para enfocarse en destrezas deportivas específicas: “busca el hueco”, “Marca al tuyo”, “ten una buena respiración”, etc.

Paso3: Practicar las conductas alternativas utilizando imaginación.

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El hecho de hablarnos a nosotros mismos, las autoverbalizaciones, ¿influye en cómo nos sintamos?

Así es. es lo que se conoce como EL PENSAMIENTO COMO AUTODISCURSO.

¿Alguna vez habéis observado a un niño de 3 o 4 años jugando a solas con un coche de juguete? Es probable que le hayáis observado hablándose en voz alta diciéndose cosas así, por ejemplo: “Ahora voy a poner mi coche aquí”, o “vaya, se ha pinchado una rueda”. El niño está pensando en palabras, pero en voz alta. Mucho de lo que pensamos está constituido por las cosas que nos decimos a nosotros mismo, es decir, nuestro autodiscurso. El “pensar en voz alta” es algo que aprendemos a hacer en la niñez, tal vez en parte porque nos ayuda a hacer las cosas con mayor eficacia.

A los deportistas se les puede enseñar a usar sus autoverbalizaciones para mejorar su desempeño en cinco áreas: para controlar sus emociones y el estado de ánimo, para detener los pensamientos negativos, para mejorar sus destrezas de concentración y para resolver problemas.

“Ejemplos: “vamos, a por ello”.”Disfruta del momento”, “mantén el control”. “No te centres en este fallo, aún queda partido, así que a por ello”. “Sigue tu rutina”. “etc… Todo esto es muy importante que la persona deportista lo aprenda para así realizar el mejor rendimiento deportivo posible.

La confianza en el rendimiento deportivo

Sin duda seguro que habéis escuchado los siguientes tipos de afirmaciones a ciertos deportistas: “Nunca he visto a Lucia jugar tan bien. Parecía tan segura a lo largo de todo el partido”. O “Luis creó que perdió su confianza al ver que su primer salto no le salió tan bien como él tenía esperado”.

Estos tipos de afirmaciones implican que la confianza es algún tipo de “cosa” dentro de nosotros que causa el rendimiento deportivo sobresaliente.

Para Mantener la confianza el día de la competición hay unas estrategias:
Los deportistas deben tener un día relajado y sin estrés antes de competir.
Los deportistas deben centrarse en lo que pueden controlar, no en lo incontrolable.
Los deportistas deben centrarse en sus fortalezas, no en sus errores.
Los deportistas deben luchar contra esos pensamientos negativos.

Mantener la confianza durante la competición:
Los deportistas deben estar activos pero mantenerse en calma.
Los deportistas deben centrarse en lo que quieren hacer, no en lo que no quieren hacer.
Los deportistas deben centrarse en el proceso, no en los resultados.